Desde el día en que llegó nos pareció que Salma no tenía la vista tana buena. Esta percepción se ha ido confirmando con el paso del tiempo. Percibe el movimiento, incluso a distancia, pero los objetos estáticos presentan un problema y a veces chocan con ellos.

¿Cómo puede ser? Todos nuestros beardies han tenido una vista de lince y a través de sus flequillos venían todo lo que necesitaban … y mas… Siempre nos habían advertido que era contraproducente recoger el flequillo de los beardies porque entonces entraba demasiado luz que podía dañar la vista. ¿Esto es lo que le ha pasado a Salma? Es posible.

Ella es perfectamente capaz de orientarse en su mundo, pero hay cierta incertidumbre y de inseguridad en ella, lo que significa que a veces le cuesta trabajo hacer ciertas cosas. También significa que puede tomar decisiones que pudieran resultar ser erróneas. Cuando sale de paseo y encuentra un charco u otro obstáculo similar que ella percibe como un agujero oscuro, puede decidir que la mejor opción es saltar, así que hay que vigilarla para evitar que tome una acción poco aconsejable.  Es una beardie llena de energía y vitalidad y es muy saltarina.

Creo que la mejor opción es preparar para el futuro dándole la oportunidad de aprender una gama de señales verbales y acústicas que le pueden ayudar, sobre todo en caso de que deteriore su vista con la edad.

Estamos dedicando tiempo a las señales más frecuentes como “Sienta”, “Ven”, “Quédate”, “Espera”, etc. Al invitarla a venir también golpeamos el lado de la pierna para que tenga un indicio espacial más claro. Hemos introducido el silbato para una comunicación a más larga distancia. También ha aprendido “Cerca”. Eso le resultó fácil y lo aprendió ella solita, porque su instinto de pastoreo hace que siempre quiera saber donde está todo el mundo y vuelve de manera natural, así que simplemente he aprovechado su comportamiento natural de puntal para que ella misma hiciese la conexión entre su comportamiento natural y la señal que yo introducía.

Otra señal útil es “Pasa”, porque le ayuda a saber cuando puede pasar por la puerta u otra apertura estrecha. Estamos ampliando esta señal para que pase por un aro y posiblemente más adelante por el túnel de agility, pero sólo si le resulta divertida la actividad.

Esta incertidumbre puede explicar por qué no quiere pisar la rampa para subir a la mesa de peinado u otras superficies elevadas. Prefiere saltar. Espero que con el tiempo decida usar la rampa porque para los perros mayores es una ayuda muy valiosa.

Claro que emplea a fondo el olfato que puede suplir las pequeñas deficiencias de la vista y le encantan los juegos de olfato y búsqueda.